Un septiembre diferente

Septiembre suele ser un mes que me motiva por los planes que empiezan y, sobre todo, por el trabajo que comienzo; sin embargo, este año va a ser muy diferente. Por primera vez en siete años, y desde que terminé la carrera de Traducción e Interpretación, allá por el 2014, estoy en paro. No es algo que me pillara por sorpresa, ya que conocía de antemano que se me terminaba el contrato en un mes tan difícil como agosto para encontrar trabajo como docente, pero, aun así, me siento raro.

De momento, tengo dos mentalidades, que se pelean entre sí y que también recoge mi tipo de personalidad: por un lado, tengo ganas de «aprovechar» que tengo prestación por desempleo, que será la primera vez que solicite, y me gustaría aprovechar este parón para cerrar frentes que estaban sin terminar, como el Máster en las Tecnologías de la Información y de la Comunicación en el Tratamiento y Enseñanza de Lenguas de la UNED; por otra, sin embargo, me encuentro en la necesidad de seguir trabajando, de seguir sintiéndome productivo, y, sobre todo, de seguir cumpliendo objetivos laborales y personales.

Sea como fuere, el primer paso está dado: si bien esto no es una situación que yo haya elegido, ya que jamás he estado en paro desde 2014, soy consciente de que necesito un cambio, de que necesito parar y de que necesito desconectar para reconectar con el camino que debo seguir. Como comentaré en artículos posteriores, y más adelante, llevo a cuestas una serie de ¿decepciones? laborales y personales que, quizás, me hayan hecho no disfrutar tanto de lo que hago, o cegarme con el fracaso, o, simplemente, han convertido lo que debería ser mi pasión en algo que no me llena.

Aun así, me gustaría centrarme en aspectos que llevo maquinando desde hace tiempo, como volver a estudiar —como ya he mencionado— y escribir artículos que me parecen interesantes, relacionados con la cultura LGTBQ, y también dedicarme a la creación y explicación de recursos didácticos. Además, me interesaría seguir contando mis experiencias laborales y personales, hacer recapitulaciones de qué he estado haciendo a lo largo de los años y también de dónde me gustaría llegar en el futuro como profesional.

Un año más (y ya van seis), sigo registrando coordenadas que me gustaría que mostraran de dónde vengo, sí, pero también a dónde voy.