Nuevos horizontes para este curso

Septiembre siempre es un mes emocionante para aquellos que nos dedicamos a la docencia, ya que es como nuestro enero: todo empieza en septiembre, y tenemos que organizar nuestra vida a partir de lo que pase en este nuevo curso. Y no es por nada, pero, con todas las puertas abiertas que tengo ahora mismo frente a mí, estoy con una mezcla entre alivio y vértigo.

Alivio porque, al menos de momento, empiezo el curso con buen pie: he conseguido trabajo y, si bien es algo temporal, estoy contento con todo el proceso, porque voy a estar ocupado y teniendo la tranquilidad de poder seguir financiándome las oposiciones. El vértigo es que no sé qué pasará conmigo después de estos meses. ¿Pedir el paro es una opción para alguien que no se puede estar quieto?

Hablando de estar quieto… ¿sabéis que esta semana es la límite para entregar las tareas del Máster en las TIC en el Tratamiento y Enseñanza de Lenguas que estoy haciendo por la UNED y que todavía tengo cosas pendientes? Lo de dejarlo todo para el último momento sigue siendo mi seña de identidad, pero (de momento) todo me ha salido más o menos bien. Esperemos que todo me salga bien, aunque esté durante 10 días supermatado a hacer cosas. De momento, solo falta buscar la concentración y la motivación, que a veces se me está haciendo muy cuesta arriba.

Otro de los grandes proyectos que me espera para este curso son las Oposiciones para profesores de Educación Secundaria, previstas para junio de 2020. Aunque ya tengo preparadora, y el día 7 de septiembre empieza mi primera jornada de preparación pura y dura, aún tengo muchísimas cosas que llevar a cabo, como los cursos de formación necesarios y los títulos de idiomas, para sumar todos los puntos posibles, ya que no tengo experiencia en cursos concertados o privados.

Lo de los títulos de idiomas es gracioso. Cualquiera puede pensar que, siendo traductor o profesor de inglés, era prácticamente seguro que tenía algún certificado que acreditara mi nivel en los idiomas con los que trabajaba, pero, ya que el grado me acreditaba un nivel superior de inglés (mi primera lengua extranjera, y la única con la que he trabajado, de hecho, como traductor), no lo tuve en cuenta.

Sobre este blog también tengo algunos cambios que anunciar. Aunque ya lo mencioné en ocasiones anteriores, seguir escribiendo en un blog con una carga de trabajo tan fuerte se me hace cada vez más difícil, pero quiero utilizar esta plataforma para seguir conectando con compañeros de la profesión y compartiendo contenido que me apetezca y me inspire; sin embargo, tener una continuidad se me hace un poco cuesta arriba. Para tener un término medio, seguiré escribiendo en este blog, aunque no tendrá un ritmo constante y estará más enfocado hacia la docencia del inglés, aunque sin dejar el contenido sobre traducción y otras cuestiones lingüísticas de lado.

Sea como fuere, espero que este curso sea intenso, como me gusta a mí, pero también reconfortante, valioso y emocionante. Veremos qué tal va este viaje en el que me voy a embarcar.

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s